Dicho de manera sencilla, un gran diseño tiene definitivamente un impacto positivo en las vidas de la gente. El diseño de un espacio y los productos que se colocan en su interior deberían permitir a la gente trabajar, vivir y existir allí para ser más felices. +Positive spaces™ nos motiva a ser mejores, pero también nos ayuda a sentirnos de lo mejor. De paletas de colores inspiradoras a elementos que promueven el bienestar, los espacios bien diseñados nos pueden hacer más felices y más sanos.
Los lugares de trabajo y los entornos comerciales del pasado generalmente no apuntaban a crear lugares que hicieran que las personas se sintieran bien y que se ajustaran a diferentes necesidades y estilos de trabajo. Por lo tanto, el desafío hoy en día es crear entornos que mejoren la productividad, la creatividad y el bienestar de sus usuarios, en lugar de minimizar los costos. De cara al futuro, está claro que las generaciones más jóvenes de trabajadores, estudiantes y visitantes a diferentes espacios exigirán opciones, variabilidad y control.
La tendencia humana
Para crear resultados positivos para las personas, nuestro enfoque ha cambiado hacia un proceso de diseño con una perspectiva centrada en el ser humano, con un énfasis en las necesidades humanas y el contexto de uso. + Positive Spaces permite a los humanos cosechar éxitos en un espacio. Proporciona un lugar para despejar su mente, un lugar para crear, un lugar para colaborar.
Según el informe de Human Spaces sobre el Impacto Global del Diseño Biofílico en el Lugar de Trabajo, poco menos de la mitad (47 por ciento) de todos los encuestados están de acuerdo en que se han sentido estresados en su lugar de trabajo en los últimos tres meses. Esta conclusión enfatiza la importancia de identificar y aplicar prácticas que puedan mejorar el bienestar en el trabajo, incluso el diseño biofílico, tomando en cuenta las experiencias sensoriales de los usuarios (vista, tacto, sonido y olfato). Por ejemplo, dos tercios (67 por ciento) de los encuestados en el informe dicen que se sienten felices cuando entran a ambientes de oficina brillantes con detalles en colores verde, amarillo o azul.
Para asegurarnos que un espacio proporcione experiencias positivas para aquellos que lo utilizan, considere las siguientes preguntas:
- ¿Cuántas áreas funcionales necesita en su espacio?
- ¿Cómo es que las personas necesitan trabajar o sentirse en estos espacios?
- ¿Cómo están fomentando la creatividad en el lugar de trabajo?
Flexibilice su espacio
A medida que los entornos de oficina han ido evolucionando en el transcurso de los años, hemos pasado de los cubículos al espacio de oficina abierto sin darnos cuenta de que la talla única que se adapta a todos no le cae bien a nadie en especial. Un interior monolítico en cualquiera de los dos extremos ignora los datos que dicen que necesitamos una combinación de tiempo de cubo, tiempo de colaboración abierta, tiempo de teléfono privado y tiempo para sentarse al sol y soñar despierto, todo en un mismo día.
En el informe de espacios humanos Human Spaces, el 39 por ciento de los trabajadores encuestados se sintió más productivo en su propio escritorio como oficina privada. Otros dijeron que se sentían más productivos en su propio escritorio como oficina abierta (36 por ciento). Y el 28 por ciento de los encuestados informó que no tienen un espacio tranquilo para trabajar en su oficina.
De modo que está claro que debemos ofrecer flexibilidad – permitiendo que la gente crezca y cree sus propios lugares de reunión, sus propios ritmos y tradiciones, es decir trabajar de la manera que más les convenga. Si el espacio ofrece una opción entre el sol y la sombra, el estímulo y la reflexión, entre conectarse y retraerse, tendremos una sensación de control y de bienestar.
Desde nuestra experiencia, encontramos la respuesta en la modularidad y la naturaleza. Los mejores espacios consisten en zonas interdependientes y conectadas, como en un bosque. Los bloques de construcción modulares ofrecen la flexibilidad, la funcionalidad y la estética para establecer estos +Positive spaces. Nos permiten facilitar un mayor compromiso del usuario.
Por ejemplo, el diseño de la sede de la tienda minorista de muebles West Elm en Brooklyn, New York incluyó planes para oficinas privadas y compartidas, salas de diseño y espacios comunitarios. Hablando de los beneficios de una variedad de áreas de trabajo, Paolo Kos, VP de Diseño en W.E. dice: «En un espacio de trabajo de oficina abierta donde se supone que deba usted sentarse en su escritorio 8 horas al día, no hay mucha privacidad. Así que tener estos otros espacios alivia el estrés. Empodera a las personas y cuando tienen control sobre cómo trabajan, creo que tienen un mayor sentido de propiedad. Son más felices e invierten más en sus trabajos».
Pensamiento innovador, thinking out of the box
La tendencia de diseño de las oficinas para ofrecer más opciones en el lugar de trabajo también puede optimizar el proceso creativo y la forma en que , and the way we interactuamos con un espacio, tanto los unos con los otros como con la tecnología Tal como se señala en el podcast El Futuro del Trabajo es Creatividad de Steelcase las áreas de trabajo están cambiando rápidamente, con nuevas presiones para crear espacios que ayuden a atraer el talento y que desbloqueen el potencial de los trabajadores a fin de ser creativos, innovadores y más productivos. Hemos asistido a un cambio hacia el trabajo creativo y no sólo en profesiones creativas. Se trata de un enfoque en la resolución creativa de problemas, desarrollar ideas novedosas y pensar de manera diferente.
Ha cambiado la forma en que trabajamos. Solía tratarse de resolver problemas complicados de una manera lineal, sabiendo de antemano el resultado que estamos tratando de alcanzar. Los problemas de ahora son más complejos, y el resultado exacto y los pasos para llegar allí no siempre se conocen de antemano ni están claros. A menudo es un proceso que requiere reunirse en grupos para colaborar y generar ideas, y luego separarse en un espacio individual para hacer el trabajo de seguimiento. Luego se juntan otra vez. Esta divergencia y convergencia requiere una amplia gama de lugares y tecnología para apuntalar las diferentes etapas del proceso creativo. Por ejemplo, la sala de conferencias tradicional está configurada para que una persona dirija un grupo, sentada alrededor de una larga mesa rectangular. No está diseñada para que las personas interactúen, se pongan de pie y tomen notas en una pared. No fomenta el pensamiento creativo.
La idea de crear + Positive spaces puede aplicarse a prácticamente cualquier tipo de entorno: espacios corporativos, de hospitalidad, educación, y muchos más. Y puede ser tan simple como manejar los colores utilizados o tan complejo como adoptar un enfoque holístico que incorpore el diseño biofílico y el Estándar de Construcción WELL. No importa el tipo de espacio o nivel de diseño, el tema es considerar cómo puede impactar positivamente a quienes interactúen con él.